jueves, 27 de marzo de 2014

LO QUE ESPERAMOS DE LA OPOSICIÓN

Colectivo Antoni Moix

                                            

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LO QUE ESPERAMOS DE LA OPOSICIÓN

28 juliol 2009 in Sabadell| Etiquetes: ajuntamentalcaldeBustosCarles Rossinyol,Carme GarcíaccooCiUeleccionsentesaercIcv-EuiaIsidre SolerMagí Rovira,oposicióppPscSabadell


             

Si nos refiriésemos a “la oposición” así, en bloque, estaríamos aceptando el juego que Manuel Bustos y su gente pretenden machaconamente fijar en la mente de todos.
Que existe una zona oscura habitada por unos seres resentidos y malvados que intentan estropear la felicidad alcanzada por los sabadellenses gracias al esfuerzo de los llamados socialistas. Que estas personas que ocupan esos puestos,(a veces parece que den a entender que por alguna deficiencia del sistema democrático), tienen como único objetivo en sus miserables vidas romper la concordia y la paz de una ciudad feliz por espúreas razones partidistas y miserables.

Bajo nuestro punto de vista, la situación es muy otra.

Manuel Bustos y su gobierno mal llamado socialista, recibió con estupor los resultados del 2007. De ninguna de las maneras esperaban quedar por debajo de la mayoría absoluta y obligados, por lo tanto, a tener que pactar para conservar el gobierno municipal. Y el panorama no pintaba fácil. Las miradas que veía en la oposición no parecían nada amables en ese momento. Pero una vez más hay que reconocer que Bustos dispone de persuasivas razones cuando quiere alcanzar un pacto. Del mismo modo que en 1999 adelantó por la derecha a la Entesa cuando, con igual número de concejales, pactó con la CiU de aquél entonces que pareció más cómoda con el joven regidor que con la gente que llevaba años en el gobierno, en el 2007 pactó con la derecha del Partido Popular. Y el primer paso, a continuación, consistió en desposeer al pleno municipal de parte de sus competencias. De ese modo rebajábamos el nivel de sustos que podría llevarse el PSC en las votaciones. Una decisión de ese tipo contó con el increíble apoyo del PP que jamás podrá justificar de forma razonada porqué ha apoyado lo inasumible en esta legislatura. Por todo ello, seguimos sin poder incluir a los peperos en el grupo de oposición a quienes queremos referirnos en este caso.

                                             

Es cierto que CiU, Icv-Euia, Entesa y ERC no tienen una tarea fácil. El mensaje constante que de forma machacona repite el gobierno socialista es el de la asfixia que le produce una oposición dura, implacable, rabiosa y radicalmente entorpecedora de los buenos propósitos municipales. Grupos que se oponen a todo sólo por el hecho de oponerse. De boicotear cualquier cosa que propongan los socialistas por el bien de la ciudad tan sólo por plantear dificultades gratuitas. Y ese mensaje ha sido lanzado en cuantas entrevistas de prensa, radio o televisión haya hecho Bustos y su gente, a lo que se suman los discursos que en público han pronunciado en decenas de ocasiones. Y ¿qué han hecho para frenar eso los grupos referidos?. Nada. O bien poco, al menos.

Cierto es que han sufrido el sistemático bloqueo de los medios. Es de juzgado de guardia el trato que reciben especialmente en los pagados por todos los ciudadanos, como los espacios comprados a un canal de televisión, la radio municipal o el infumable “Sabadell a prop”. A prop de la felicidad orgásmica, debe ser, por el mundo perfecto que reflejan siempre sus páginas.

Pero también es cierto que la política es el arte de los gestos y que Manolo se ha divertido mucho viendo la poca cohesión de los señores que se sientan enfrente de los socialistas en el pleno. Los grupos que Bustos temió que pudieran alcanzar una alianza al principio de la legislatura, (prácticamente lo mismo que él hizo al principio de la anterior, sumando a casi todas las fuerzas dentro del gobierno), hoy acusan sonadas diferencias en las mociones de los plenos. Y es evidente que todos ellos podrían haber hecho esa oposición dura de la que han sido acusados injustamente y no ha sido así. Baste ver la cantidad de propuestas socialistas que salen adelante con el apoyo de varios de esos grupos. De la misma

                                        

manera que resulta muy complicado algo que debería ser tan sencillo como ponerse de acuerdo para apoyar iniciativas comunes y evidenciar la soledad en la que nos gustaría que se encontrara el grupo socialista y su escudero de la derecha. Pero eso no ha sido tampoco así. Y por lo tanto, si hoy Manuel Bustos conserva buena parte de su musculatura es porque la oposición no ha ejercido hasta hoy un papel como el que nos habría gustado.

Ante los desplantes del Alcalde, ante sus salidas de tono y frente a las situaciones de complicada explicación que se le han planteado, los grupos deberían hablar con una voz sólida y contundente. Pero no es así, aunque después él venderá el humo que quiera y los medios lo difundirán. Y ese es el mensaje que calará. Hoy por hoy ha logrado con facilidad tantas y tantas veces salir indemne de situaciones complicadas que su desgaste es actualmente mucho menor del que merecería.

Del mismo modo entendemos que en la oposición hay hoy personas de una talla intelectual y moral inmensamente superior a la de él y, por lo tanto, en muchas ocasiones les resulta difícil descender al nivel de debate que suelen plantear algunos responsables del gobierno, comenzando por su líder.

Recuerdo haber visto muchas veces la cara de hastío de Dolors Calvet en la primera legislatura Bustos, quien después de haber estado en el Congreso midiéndose con los Fraga, Felipe, Suarez, Carrillo y Pasionaria ver a ese hombre con su pobre discurso le generaba tal cansancio intelectual que a veces resolvia sus intervenciones con un escueto “m’hi oposo” y punto. ¿Para qué explicarle más a este? daba la sensación que pensaba una de las políticas más brillantes que han pasado jamás por la Plaça Sant Roc.


                                     

Pero es cierto que algunas salidas de los portavoces municipales a veces nos desconciertan. No nos gustan notas como la emitida por Carme García, la portavoz de Icv-Euiarecientemente felicitando al Ayuntamiento por su rectificación en el tema de la suspensión de la recepción de Festa Major. Porque no había nada que felicitar. Y porque acabó poniéndoselo fácil al gobierno para dar a entender que era ella que no se enteraba, que no habían dado marcha atrás sino que eran actos distintos. Como si hubiese picado un anzuelo que le habían tendido y que ella se lanzó a morder. Ni nos ha gustado la manera en la que ha anunciado “una sorpresa trencadora” para septiembre. En primer lugar porque la expresión nos parece desafortunada en términos políticos y por otro, porque las propuestas como las que parecen insinuarse aquí nos gustaría conocerlas cuando estén hechas y firmadas, extremo que no parece que hoy por hoy se haya logrado aún. Anticipar algo así parece que pueda propiciar más dinamitar cualquier propósito antes de su alumbramiento que el lograr la calma necesaria que cualquier acuerdo político necesita. Pero de todos modos es un juicio precipitado y esperaremos a ese mes, de regreso de vacaciones, para saber si la prudencia y el control necesarios que cualquier líder político ha de tener es uno de los activos de Carme García de quien, por otro lado, conocemos su integridad y entereza.

Del mismo modo creemos que grupos como l’Entesa, Erc y CiU han destinado mucho tiempo y esfuerzo a temas que consideramos menores y han permitido mucho oxígeno político a un gobierno a quien hubiese sido fácil poner contra las cuerdas en distintas ocasiones. Que hoy el debate no debería ser el segundo centro cívico del centro ni que Sabadell esté libre de transgénicos, el Parc Agrari o si aparcar el coche en el vado própio. Por interesantes que puedan ser esos temas para cada grupo y sus electores, pero no centrar los esfuerzos como así lo han hecho. Hoy las acciones de desgaste deberían ser muy contundentes. Las denuncias muy claras y ante los organismos que correspondan y, los gestos en el pleno, firmes y cerrados. No como sucede hoy.

Por cierto, que no se nos tiene que pasar por alto que ha tenido que ser un sindicato, CCOO, quien ha liderado algunos de los tragos más amargos que ha tenido Manuel Bustos en los últimos meses.


                                                                                                           
En las circunstancias actuales es imprescindible que los personalismos y las estrategias políticas cortoplacistas queden a un lado para facilitar el más importante de los objetivos. Que el líder municipal que ha invertido más tiempo, esfuerzo y dinero en construirse una imagen para permanecer en el poder muchos años quede desenmascarado ante sus electores. Que conozcan la auténtica gestión municipal y no la que se propaga a través de los medios que todos contribuimos a mantener, ya sean públicos o privados. Y cualquiera que no facilite esa tarea está en el mismo grupo que Manuel Bustos. Y viniendo de nosotros no hay que explicar lo que eso significa.

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